Cocinar a partir de ingredientes saludables, naturales y no estresantes para el organismo. De esta manera podrás mejorar notablemente tu calidad de vida y prevenir muchísimas enfermedades.

Cocinar 100% a base de vegetales y sin gluten de tal forma que puedas mejorar tu salud intestinal, tu cuerpo emocional y tu sistema inmunológico.

Combinar adecuadamente los alimentos para optimizar la digestión, prevenir la inflamación intestinal, la pesadez y ahorrar mucha energía que se suele desviar hacia la digestión en vez de utilizarse en la reparación del organismo y la depuración.

Bajar el índice glucémico de los alimentos y crear recetas aptas para diabéticos. De esta manera evitarás tener picos de glucosa en sangre y podrás prevenir la resistencia a la insulina. A su vez estos picos de glucosa en sangre se relacionan directamente con el aumento del peso porque el exceso de energía que no utilizamos se transforma en grasa.

Transformar los antinutrientes de los cereales, las semillas y las legumbres. Aumentar la
biodisponibilidad de los alimentos y conservar los nutrientes al máximo: los cereales, legumbres y semillas son alimentos fisiológicos para el ser humano siempre y cuando se utilizan de forma adecuada.
Si no quitamos los inhibidores enzimáticos que tienen estos alimentos vamos a ncorporar sustancias químicas que son nocivas para nuestra salud en el corto y largo plazo ya que muchos de los antinutrientes funcionan como quelantes. Eliminan nutrientes que sí necesitamos en el organismo y/o dificultan la absorción de los mismos. Por ello seguimos varios pasos: lavado adecuado + remojo o
activación adecuada + germinación o cocción adecuada.